Es difícil resumir rápidamente los posibles errores durante un proceso de fabricación debido a su complejidad, pero creo que podemos condensar una visión básica en cuatro puntos clave para entender cómo, en Lúcid, trabajamos para apoyar a nuestros clientes en la fase más importante del producto.
Obviamente, hay muchos factores a tener en cuenta durante un proceso de fabricación: el cliente, el tipo de producto, el diseño, la ingeniería, los materiales, los presupuestos, los costos objetivo, el alcance del proyecto, los plazos, la evaluación comparativa, las funciones, etc.

Quiero abordar este análisis desde una perspectiva general. Sin entrar en detalles, destacando 4 puntos clave que nos permiten liderar un proceso de fabricación exitoso:
1. Planifique para replanificar
Saber cómo planificar un proyecto de fabricación es fundamental. No basta con crear un diagrama de Gantt y creer que se tiene una lista de proyectos perfecta. Una buena planificación garantiza una utilización óptima de los recursos mediante el análisis del tipo de producto, sus requisitos de recursos, la complejidad, los plazos, el desarrollo, etc.
Si bien la planificación es el mejor método para minimizar los imprevistos, es importante reconocer que pueden surgir, y la mejor manera de responder es con un equipo preparado para volver a planificar.
En Lúcid, contamos con un equipo profesional dedicado a la investigación, el análisis de usuarios y la evaluación comparativa, lo que, entre otras cosas, nos ayuda a comprender y anticipar las necesidades futuras de los productos. Esto nos permite planificar la fabricación con una visión más profunda.

2. Control, incertidumbre y objetivos
Tan importante como lo es la planificación controle all process.
El objetivo principal es verificar que todo lo planificado se esté ejecutando correctamente, identificar las desviaciones y aplicar las correcciones para replanificar en consecuencia.
- ¿Necesitas más tiempo para un proceso?
- ¿Faltan recursos?
- ¿Se necesitarán más materiales o materiales diferentes de los estimados?
Si no podemos garantizar un flujo fluido de todos los procesos, no podemos garantizar los costos o ahorros objetivo, lo que genera desperdicios, sobrecostos innecesarios y demoras en la entrega de los productos.
Esto es posible gracias a la proximidad y al control in situ en los momentos y procesos clave. En Lúcid, lo logramos con nuestras sedes en España, Europa Central y China, lo que nos permite supervisar de cerca todo el proceso mediante herramientas como las auditorías de fábrica y los controles de calidad.
Estar presentes en los procesos de fabricación nos permite mantener el control en cualquier etapa de la producción (socios, ofertas, compras y envíos de muestras, auditorías de fábrica, I+D, especialización de productos, cadena de suministro, distribución, etc.).

3. Metodología y diseño para un resultado exitoso
Una buena forma de anticipar los posibles problemas es mediante una fase preliminar de visión y estrategia que garantice un proceso óptimo de desarrollo del producto.
Todos los proyectos de fabricación se configuran según la fase de diseño que los precede, en la que se investiga y analiza a los usuarios para crear un diseño que satisfaga sus necesidades.
El inicio exitoso de un proyecto de fabricación requiere una orientación previa durante la fase de diseño.
En Lúcid, siempre seguimos un metodología eso nos permite avanzar en el proceso de diseño de forma segura, garantizando un resultado de fabricación exitoso.

4. Coordinación del equipo
Entre todos los puntos mencionados, me gustaría destacar uno que a menudo se pasa por alto: las personas.
Podemos planificar, controlar e implementar metodologías, pero son las personas que participan en cada etapa del proceso de principio a fin.
Desde entender al cliente que solicita un producto hasta los equipos que ejecutan las diferentes etapas de producción, la transparencia, la honestidad, la buena comunicación, la empatía, la capacidad de escucha, la evaluación y la capacidad de transformar las propuestas en acciones son cruciales.
Creemos que es esencial involucrar a nuestros clientes en cada fase, asegurándonos de que se sientan comprometidos, informados y comprendan las complejidades de su producto.

Al mismo tiempo, un método de trabajo por fases requiere la interacción y la participación de varias partes interesadas internas y externas, cada una con su función.
En conclusión, el proceso de fabricación requiere dedicación para garantizar el correcto desarrollo de un proyecto. En Lúcid, contamos con un equipo de fabricación capaz de coordinar, controlar y ejecutar todas las etapas de producción, con el objetivo de completar con éxito el proceso de diseño.